Los restos de los animales fueron encontrados unos cerca de otros durante las últimas tres semanas en la Reserva de Gunung Rara, según informa Laurentius Ambu, director del departamento de Fauna Silvestre del estado de Sabah, en la isla de Borneo.
Los agentes pudieron rescatar a una cría de tres meses que fue encontrada intentando despertar a su madre muerta.
El envenenamiento parece la causa más probable, pero aún no se ha podido establecer si ha sido intencionado, según el ministro de Medio Ambiente de Sabah, Masidi Manjun.
Aunque en el pasado algunos elefantes de Sabah fueron cazados furtivamente para conseguir sus colmillos, no hay ningún signo que indique que hayan sido envenenados por este motivo.
La necropsia efectuada por el veterinario del parque ha revelado múltiples hemorragias en el tracto gastrointestinal, pero ninguna herida de bala. Aún están en espera de los resultados del examen toxicológico.
En Borneo existen alrededor de 1500 elefantes de este tipo, un poco más pequeños que sus equivalentes asiáticos, y en 2003 se descubrió gracias a test de ADN que existen distintas subespecies dentro de esta población. "Es un día triste para el conservacionismo y para Sabah" ha concluido Manjun.
Con información de The Guardian.
No hay comentarios:
Publicar un comentario